
Jueza envía a prisión preventiva al abogado Alejandro Henríquez y al pastor José Ángel Pérez
La decisión de la jueza, según los abogados, tiene repercusiones más allá del caso específico, pues criminaliza el derecho a manifestarse pacíficamente.
Ruth ha solicitado un juicio público “porque la gente merece saber”, pero la Fiscalía pidió reserva total del caso y el juzgado concedió que el proceso judicial no sea ventilado públicamente.
La decisión de la jueza, según los abogados, tiene repercusiones más allá del caso específico, pues criminaliza el derecho a manifestarse pacíficamente.
La decisión judicial en el caso contra Alejandro Henríquez y el pastor José Ángel Pérez está apegada a los intereses de la dictadura de Bukele y no a derecho.
Estudios demuestran que la tensión psicológica puede acelerar los tumores malignos. ¿Podrían los betabloqueadores frenarlos?
El Presupuesto General de la Nación es un documento en el que se puede notar cuáles son las prioridades del gobierno cada año. Para 2025 no hay sorpresas. El bukelismo seguirá apostándole a la publicidad de su imagen y al Ejército.
En septiembre de 2021, la Policía Nacional Civil generó un reporte que vinculaba a agentes policiales con el asesinato de 279 personas en los 33 meses transcurridos desde enero de 2019. Para entonces, la Fiscalía ya tenía años siguiendo la pista a una organización a la que se conoció como Los Exterminio, que había iniciado en 2015 asesinando pandilleros, pero que después diversificó sus operaciones criminales y comenzó a asaltar todo tipo de negocios, a extorsionar, a dedicarse al sicariato y hasta a matar a policías sospechosos de estarles investigando.
Elías no tenía nada de lo que El Diablo buscaba durante aquel crepúsculo de 2022: algo que lo vinculara a pandillas. Pero ese agente policial era portador de la más poderosa arma que pueda tener en estos días un uniformado en El Salvador: el régimen de excepción. La conducta de El Diablo retrata el extremo al que pueden llegar el abuso, la violencia y la ilegalidad cometidas contra personas inocentes por parte de quienes con placa de policías olvidaron su deber de prevenir y combatir el delito y hoy creen tener licencia para cometerlo