Conoce lo que hacemos:

Este proyecto surge cuando en el mundo hay montadas fábricas de desinformación que promueven intereses específicos para dominar la opinión pública.

La gente confía en información solo porque le llegó a través de una red social, pero lo que sucede y se dice en redes sociales no siempre corresponde a la realidad. 

En El Salvador, los actores políticos están siguiendo el camino de utilizar con fuerza las plataformas digitales para dirigir sus propios contenidos a la población. De esta manera, evitan saltarse el cuestionamiento y diálogo con la prensa para discutir la realidad.

En Ojo de Gato no nos conformamos con una única versión y queremos volver al periodismo básico que implica: contrastar, comprobar, verificar.  Este es un proyecto de servicio público para acercar al ciudadano a la verdad. 

El “fact cheking”es una  de las alternativas más usadas por distintas organizaciones en el mundo para luchar contra las noticias falsas. En esta primera fase nos concentraremos en escuchar y leer la información y mensajes que emiten las instituciones del Ejecutivo,  para constrastar y verificar los datos que dan.

¿Quién nos financia?

Una de las preguntas más frecuentes es quién financia este proyecto de verificación. Nosotros no tenemos ningún problema con ser transparentes y explicar que Ojo de Gato existe gracias al apoyo financiero de la Fundación Seattle. Para obtener la subvención, postulamos nuestro proyecto a la convocatoria que abrieron en 2019 para apoyar medios que hacen periodismo independiente. 

Cuando decidimos chequear una frase es con el propósito de brindar más información a nuestros lectores. Nuestro método de trabajo tendrá cinco pasos básicos:

-Selección de la frase a verificar después de un proceso de justificación de su importancia por la relevancia y la persona que la emitió.

-Búsqueda de datos y ampliación de información de la fuente original.

-Reporteo de calle en lugares, con afectados y/o especialistas en la materia para buscar el contraste y chequeo

-Procesamiento del material para confirmar si la frase se confirma, se contrasta o se refuta.

-Selección de una categoría de publicación.

La frase fue corroborada con hechos o datos en fuentes oficiales o especialistas y se sostiene.

La información del discurso no puede comprobarse. Es falsa.

La afirmación es una verdad a medias. Contiene datos correctos pero le falta información adicional. O contiene datos incorrectos para dar una impresión falsa o imprecisa.

La frase contradice el discurso previo del emisor de la misma o de las otras instituciones oficiales.

Se ignoran elementos importantes. La frase es creíble debido a que se puede verificar con las fuentes disponibles, pero hay datos imprecisos u omitidos.