El viernes 24 de abril, el Gobierno de El Salvador envió a su Equipo Interdisciplinario de Contención Epidemiológica (EICE) a la Asamblea Legislativa para realizar pruebas de COVID-19. Pero el camión no fue autorizado para ingresar, así que se instaló afuera.
Esto ocurrió un día después de que el presidente de la República, Nayib Bukele, dijo en su cuenta de Twitter que en la Salón Azul había sospechas de un caso de coronavirus. Lo dijo sin presentar pruebas y en el momento exacto cuando los diputados estaban a punto de superar un veto para obligar al Gobierno a dar equipos de protección y capacitación al personal médico que atiende la emergencia por COVID-19.
El tuit de Bukele hizo que algunos diputados abandonaran el Salón Azul, después de superar el veto. El presidente de la Asamblea Legislativa, Mario Ponce, decidió cerrar la sesión plenaria. La jefa de fracción del FMLN, Nidia Díaz, calificó el tuit del presidente Bukele como una nueva intromisión del Ejecutivo al Legislativo y un boicot.
El tuit fue publicado por Bukele después de que la diputada Yanci Urbina, del FMLN, tuvo un ataque de tos mientras hacía uso de la palabra en la sesión plenaria 100.