El pecado capital de las energías limpias
El río Sensunapán, en Sonsonate, fue testigo silencioso del despojo de tierras indígenas y luego de la masacre ocurrida en 1932, durante la dictadura militar de Maximiliano Hernández Martínez. Aquí, el pasado y el presente se juntan en una historia de explotación de recursos naturales y segregación étnica, que se mantiene vigente gracias a la generación de energías limpias que promueven siete pequeñas hidroeléctricas y una octava que pretende instalarse.... Leer más