Por años, Cristosal ha sido de las principales organizaciones de sociedad civil que ha atendido a las víctimas de desplazamiento forzado en El Salvador. Durante el régimen de excepción, la organización ha podido observar cómo las pandillas han cambiado su influencia, pero aún siguen provocando desplazamientos forzados entre la población.
La directora de monitoreo de Derechos Humanos de Cristosal, Rina Montii, explicó durante una entrevista radial que, en este año, en el período del régimen de excepción, han conocido 255 personas que tuvieron que huir de sus hogares por hechos de violencia. Aunque algunos casos se han dado también por el hostigamiento de las fuerzas de seguridad, la mayoría han sido por las pandillas.
“Si vemos el número de personas desplazadas en este período, en estos seis meses, en comparación con los del año pasado, probablemente estemos hablando de una tendencia bastante similar”, dijo Montti.
Aunque los casos han disminuido en comparación a los años 2017 y 2018, la tendencia se ha mantenido similar a 2021. “Eso nos puede señalar que las condiciones del año pasado se mantienen aún este año, a pesar de las condiciones de control que se tienen de parte del Estado en el territorio”, dijo Montti.
Además, explicó que en estos últimos meses han visto cómo ha cambiado la forma en que las pandillas ejercen influencia sobre la población. Montti dijo que han encontrado casos muy lamentables, como el de varias personas que han tenido que huir de sus hogares porque las pandillas han cobrarles la extorsión atrasada, es decir que exigen que paguen todo lo que no pudieron exigir durante los últimos cuatro a cinco meses. Debido a que las personas no pueden pagar un monto tan alto, son víctimas de amenazas u otros hechos violentos.
“Esto no es algo que veíamos el año pasado”, comentó Montti.
Además, han visto casos de familias que han tenido que huir de sus comunidades después de que las pandillas los acusaran de haber hecho llamadas anónimas para que se llevaran a un miembro de pandillas de la zona.
“Todavía se percibe la influencia y el poder que tienen las pandillas en los territorios”, lamentó Montti.