Género

"Las 17 y más" recuperan su libertad tras enfrentar condenas injustas por emergencias obstétricas

Un total de 73 mujeres que fueron condenadas injustamente tras sufrir abortos, por complicaciones en su embarazo o negligencias médicas, recuperaron su libertad en los últimos años, gracias al acompañamiento legal que tuvieron de la Agrupación Ciudadana por la Despenalización del Aborto. Lilian fue la última de las mujeres en ser liberadas. Todas esas mujeres, que eran parte de la campaña “Las 17 y más”, coinciden en haber sido procesadas como criminales bajo la estricta legislación salvadoreña en contra del aborto, a pesar de su inocencia. La Agrupación exige que el Estado salvadoreño revise y corrija su legislación para evitar que más mujeres sean criminalizadas.

Representantes de la Agrupación Ciudadana por la Despenalización del Aborto celebran, junto a Lilian, la libertad de "Las 17 y más". Foto/Óscar Hernández

Por Óscar Hernández

Enero 18, 2024

La Agrupación Ciudadana por la Despenalización del Aborto celebró que la reciente liberación de Lilian* representa el cierre de un proceso de litigio estratégico para lograr la libertad de “Las 17 y más” que tenían condenas de prisión en firme, una de ellas hasta por 50 años, luego de sobrevivir a partos extrahospitalarios y emergencias obstétricas en la última década. La mayoría de las 73 mujeres de estos casos coinciden en provenir de zonas pobres, ser arrestadas cuando todavía estaban sedadas y en cuidados médicos, ser trasladadas de un hospital a la cárcel y ser sometidas a procesos judiciales bajo las estrictas restricciones que impone la legislación salvadoreña en contra del aborto, incluso si es involuntario tras un embarazo con complicaciones. O como en el caso de Lilian, quien fue condenada a pesar de que el fallecimiento fue la consecuencia de una negligencia médica y no de un aborto, según reconoció el Tribunal que anuló su condena. 

De acuerdo con la presidenta de la Agrupación, Morena Herrera, la liberación de Lilian y todas las mujeres de “Las 17 y más” ha sido tan solo “un paso en el largo camino para alcanzar justicia en El Salvador”, que es el país con la tasa más alta del continente en criminalizar y perseguir a mujeres por emergencias obstétricas. 

“Se ha hecho justicia. Con Lilian hemos logrado que recuperen la libertad y la posibilidad de que construyan sus proyectos de vida todas las mujeres que han sido acusadas y condenadas por abortos y emergencias obstétricas. Hemos logrado la libertad de Las 17 y más”, dijo Herrera, con entusiasmo.

Mariana Moisa, coordinadora de la Agrupación, explicó que en estos años la campaña “Las 17 y más” logró visibilizar la criminalización de las mujeres salvadoreñas a una escala internacional, donde muchas personas se han unido para exigir que El Salvador revise su legislación y deje de perseguir y criminalizar a las mujeres.

“Íbamos conociendo casos de mujeres. Al inicio eran 17 las que conocimos. De ahí lanzamos la campaña ‘Libertad para las 17’, y se han ido sumando cada vez más casos. Y esta campaña consiguió la movilización a nivel nacional y también internacional a esta lucha que es justa para que las mujeres también tengamos acceso a nuestros derechos sexuales y reproductivos”, mencionó Moisa.

La lucha sigue

La abogada de la Agrupación, Angélica Rivas, explicó que a pesar de dar por cerrado el proceso de litigio en favor de las 73 mujeres que ya tenían condenas en firme, la lucha sigue para acompañar legalmente a otras mujeres que actualmente están enfrentando procesos judiciales con el fin de evitar que sean condenadas.

“No abandonamos nuestra estrategia de litigio, porque tristemente en nuestro país siguen habiendo casos. En nuestro país se sigue criminalizando a las mujeres. Tenemos, en este momento, cinco casos que están en proceso judicial y en los que estamos llevando su defensa legal, y tenemos 11 casos que están en vía administrativa. Pero ellas no son de nuestra campaña de Las 17, porque están en una fase de investigación”, detalló Rivas. 

La defensora agregó que la Agrupación sigue insistiendo al Estado para que no solamente revise que los procesos judiciales estén libres de discriminación de género, sino que también revise y corrija la legislación: “Mientras eso no cambie, seguirá habiendo casos”, señaló.

El caso de Lilian

En 2015, Lilian quedó embarazada por segunda vez. En ese año, se dedicaba a cuidar su hija de dos años y a trabajar como cosmetóloga a domicilio. Tras complicaciones en su embarazo, fue trasladada al hospital nacional San Juan de Dios, en Santa Ana, donde fue sedada por un desgarro de útero. El procedimiento médico provocó la muerte de su bebé, según reconoció el Tribunal que le concedió la libertad después de permanecer injustamente siete años en prisión. El hospital negó la negligencia médica y denunció a Lilian, quien fue acusada inicialmente de “abandono y desamparo de personas”, pero luego la Fiscalía General de la República (FGR) le cambió el delito por homicidio agravado.

Abigail Cortez, coordinadora del equipo jurídico de la Agrupación, criticó que la Fiscalía no presentó argumentos para validar que el caso se trataba de un homicidio agravado, pero aun así pidió la pena máxima de 30 años de prisión.

A criterio de la abogada Angélica Rivas, la Fiscalía vio en este caso una oportunidad de elevar sus números de condenas y efectividad, sin importarle que una joven madre fuera enviada a prisión, mientras en su casa tenía una niña de dos años que la esperaba.  

“Lamentablemente este país es tan injusto con las mujeres que sufrimos tanta discriminación. A la Fiscalía General de la República se le ocurrió decir que ella había cometido el delito de homicidio agravado, vieron en este caso cómo lograr una condena rápida en contra de alguien que tenía dificultad para decir algo en su defensa y es así como Lilian termina condenada a 30 años de prisión”, señaló Rivas.

Cuando la Agrupación se enteró del caso, solicitó una revisión de la sentencia. En respuesta, el juez que condenó a Lilian fue el mismo que aceptó la revisión, pero argumentó que daría la misma sentencia que había emitido en 2015. Sin embargo, tras una apelación interpuesta ante la Cámara de lo Penal, ésta ordenó la realización de una audiencia y sacó al juez del caso por adelantar el criterio. 

En la audiencia, la jueza suplente anuló la sentencia condenatoria de homicidio agravado y ordenó que se hiciera un nuevo juicio en contra de Lilian por el delito que inicialmente fue procesada. El resultado de ese juicio fue la absolución y que la responsabilidad recae en el hospital, debido a que Lilian y su hija se encontraban en condiciones de vulnerabilidad.

“Las emergencias obstétricas son eso: emergencias. Eso no es un delito, ni debe ser perseguido ni en El Salvador ni en ninguna parte del mundo. Lamentablemente, El Salvador es un antimodelo, porque en otros países cuando contamos estos casos la gente se escandaliza, porque estos casos son de escándalo”, mencionó Rivas.

Lilian fue puesta en libertad el pasado 1 de diciembre de 2023, lo que le permitió disfrutar las fiestas navideñas con su otra hija, a quien no pudo celebrarle cumpleaños o salir a pasear y de quien se perdió su primer día de escuela por estar injustamente en prisión. Su hija ahora tiene 10 años. 

“Estoy muy feliz por reunirme con mi familia. Agradezco el apoyo de todas las personas que también lucharon por mi libertad y las de mis compañeras. Como dije, y lo repito, soy inocente. Pido en nombre de mis compañeras: ¡Ya no sigan denunciando a más mujeres, que como nosotras son inocentes!”, exigió Lilian.