Elecciones 2024

Representantes de JRV no estaban capacitados para atender adecuadamente a personas con discapacidad

En algunos centros de votación, de todo el país, las personas con discapacidad visual y las que usan sillas de ruedas tuvieron dificultades para votar. Sobre todo porque hubo representantes de las JRV que no estaban capacitados para atenderlas de forma adecuada. Una de las razones de la falta de capacitación es que algunos de los miembros de las JRV se sumaron al proceso electoral el mismo día de las elecciones y no estuvieron en simulacros ni capacitaciones.

Manuel Alas y su madre, ambos con discapacidad visual, ejercen su voto. Foto/Oscar Hernández

Por Óscar Hernández

Febrero 4, 2024

En diferentes centros de votación, en todo el país, integrantes de las Juntas Receptoras de Votos (JRV) carecían de protocolos y conocimientos para brindar una adecuada asistencia a las personas con discapacidad visual que se acercaban para ejercer su derecho al voto. En los centros de votación que GatoEncerrado visitó fue evidente la falta de comprensión sobre los procedimientos de votación accesibles y la falta de capacidad para proporcionar orientación específica a quienes lo necesitaban. 

Una muestra de eso ocurrió en el Complejo Educativo Cantón Las Cañas, en San Bartolo, Ilopango, donde Marlon Alas y su madre llegaron a votar. Ambos tienen discapacidad visual y sabían que podían votar de forma independiente, utilizando los sobres tiflológicos. 

Cuando Marlon Alas preguntó por el sobre tiflológico para que su madre pudiera votar, los representantes de la Junta Receptora de Votos le respondieron que se acercara a la urna y que allí lo encontraría. Pero cuando llegó a la urna, no encontró nada. Así que preguntó de nuevo dónde estaba el sobre con sistema braille. Cuando los miembros de la Junta escucharon la interrogante, se preguntaron unos a otros: “¿qué es eso?”.

Un vigilante electoral que estaba en el lugar y el mismo Alas, quien además es miembro de la Asociación de Ciegos de El Salvador (ACES), les explicaron que es un sobre con sistema braille que utilizan los ciegos para leer sobre la papeleta y poder votar de forma independiente, sin necesidad de tener un guía y así garantizar la privacidad el voto secreto.

El incidente dejó en evidencia que los representantes de las JRV no estaban capacitados para atender a personas con discapacidad visual y que el Tribunal Supremo Electoral (TSE) hizo muy poco para garantizar la capacitación de todas estas personas. Aunque sí hubo algunas capacitaciones, no todos los que integraron las JRV llegaron. Otro de los problemas fue que representantes de partidos, especialmente del oficialista Nuevas Ideas, conformaron las juntas el mismo día de las elecciones sin haber estado en simulacros ni capacitaciones.

Ante el incidente, Marlon Alas dijo a GatoEncerrado que le preocupa que las cosas sigan igual para las próximas elecciones del 3 de marzo, en las que los salvadoreñas votarán por  alcaldes y diputados para el Parlamento Centroamericano (PARLACEN). 

En otros centros de votación también hubo quejas de personas en sillas de ruedas que se veían obligadas a subir por gradas y hasta un segundo nivel para encontrar sus JRV y ejercer su derecho al voto. Denunciaron que, en general, los centros de votación no estaban adecuados para facilitar la movilización de personas con discapacidades.