Elecciones 2024

Bukele pide al TSE que lo inscriba como candidato para buscar una reelección inconstitucional

Casi a la medianoche y en medio de una multitud de simpatizantes, el presidente Nayib Bukele llegó al Tribunal Supremo Electoral para pedir una ilegalidad: ser inscrito como candidato a la presidencia a pesar de que está prohibida la reelección continua. No llegó solo, lo acompañó su compañero de fórmula Félix Ulloa, sus dos hermanos que toman decisiones en el gobierno aunque no son funcionarios  y su primo el presidente del partido oficialista Nuevas Ideas. Al salir del Tribunal, con megáfono en mano, se dirigió a sus fanáticos para pedirles que arrasen en las elecciones y entierren a los partidos tradicionales Arena y FMLN. Asimismo, aprovechó para repetir la narrativa de que espera que la comunidad internacional no se entrometa en los asuntos de El Salvador. 

Bukele se dirige a sus simpatizantes afuera del TSE, luego de pedir que sea inscrito como candidato presidencial. Foto/Bladimir Nolasco

Por Eugenia Velásquez

Octubre 27, 2023

El presidente Nayib Bukele y el vicepresidente Félix Ulloa solicitaron al Tribunal Supremo Electoral (TSE) que los inscriba como candidatos para competir por los mismos cargos en las elecciones de 2024, bajo la bandera del partido Nuevas Ideas, pese a que la Constitución de El Salvador prohíbe la reelección inmediata.

El plazo de inscripciones de candidatos a diputados y presidentes venció a la medianoche del 26 de octubre. Unas horas antes, el oficialismo generó incertidumbre sobre si Bukele se presentaría ante el Tribunal, debido a que diputados y funcionarios del gobierno empezaron a difundir mensajes en redes sociales aludiendo a que el mandatario atravesaba una emergencia de salud y que estaba en un hospital privado. 

Finalmente, Bukele y Ulloa llegaron entre 10:56 y 11:07 de la noche en dos caravanas de más de 12 vehículos y motorizados del batallón presidencial que ingresaron al parqueo del Tribunal. Ante el descontrol de seguidores, youtubers y periodistas que se apostaron a las afueras del edificio, la institución cerró la cortina de hierro de la puerta principal, que luego fue custodiada por elementos de seguridad armados.

A las 11:37 de la noche, Nuevas Ideas publicó en su cuenta de X (antes Twitter) fotografías en las que se observa cómo Bukele y Ulloa fueron recibidos por cuatro magistrados propietarios del Tribunal para entregar la solicitud de inscripción. 

Minutos después, a las 11:47 de la noche, bajo consignas de sus seguidores, el presidente Bukele habló desde la entrada del Tribunal con un megáfono, rodeado de más de una decena de guardaespaldas que lo protegían con chalecos antibalas. Detrás de él estaban dos de sus hermanos, Karim y Yusef Bukele —quienes no tienen ningún cargo en el gobierno, pero igual toman decisiones—, y su primo el presidente del partido Nuevas Ideas, Xavier Zablah Bukele.

“Yo también los amo”, les dijo Bukele a sus simpatizantes, desatando en ellos euforia, como si una estrella de la música les estuviera hablando directamente. Algunos de sus fanáticos se fueron a los golpes en un mar de gente que grababa el momento con sus teléfonos celulares. El candidato presidencial del partido PAÍS, José Cardoza, quién había llegado horas antes con un grupo de apoyo alzando la bandera de Estados Unidos, fue sacado del lugar a empujones y con insultos, pues buscaba acercarse a la entrada del TSE en donde se encontraba Bukele.

Bukele instó a sus simpatizantes a arrasar en las urnas con sus votos y acabar de una vez por todas con los partidos tradicionales Arena y el FMLN. Aseguró que se postula como candidato, pero será la ciudadanía quien decida si quiere que él continúe en la presidencia o no: “El pueblo salvadoreño decidirá si quieren que le demos a los niños un capirucho o una computadora”, afirmó. 

La inscripción de Bukele ocurrió en la misma semana cuando el Subsecretario para Asuntos del Hemisferio Occidental de Estados Unidos, Brian Nichols, visitó El Salvador y se reunió con el mandatario. Sus declaraciones mostraron un cambio en la postura de Estados Unidos respecto a la reelección presidencial. Nichols dijo que la decisión de permitir la reelección presidencial “es un tema para los salvadoreños”, quienes deben de tener un “debate amplio sobre la legalidad y la legitimidad de la elección”. El 5 de septiembre de 2021, la postura de Estados Unidos fue de condena al fallo de la Sala de lo Constitucional que permitió la reelección.

En su discurso, con megáfono en mano, Bukele también insistió en su narrativa de pedirle a la comunidad internacional que no sea injerencista en El Salvador.

“A la comunidad internacional yo siempre lo que les digo, he tenido reuniones hace poco, he tenido reuniones antes, y yo siempre les he dicho lo siguiente a cualquier país, sobre todo los que son importantes para nosotros, en términos de importaciones, de que tenemos personas allí, como Estados Unidos, por ejemplo, o Europa o cualquier país, yo siempre les he dicho: nosotros somos sus amigos, somos sus aliados, somos sus socios, lo que no podemos ser es un lacayo, El Salvador está listo para trabajar con toda la comunidad internacional de la mano, estamos listos a cambiar lo que tenemos que cambiar para poder insertarnos aún más en la comunidad de Naciones, pero siempre respetando nuestra soberanía y nuestra independencia”, dijo, mientras sus seguidores le aplaudían.

La reelección inmediata es “inconstitucional”

Diferentes constitucionalistas, académicos y analistas políticos han fundamentado su rechazo a las intenciones del mandatario salvadoreño, basándose en al menos siete artículos de la Constitución que hablan sobre la prohibición y las consecuencias de que un presidente en funciones busque mantenerse en el cargo de forma inmediata al término del periodo para el que fue electo.

En El Salvador, el presidente de la República es elegido para gobernar durante 5 años. El 3 de febrero de 2019, Bukele ganó las elecciones y asumió el cargo el 1 de junio de ese mismo año. Su mandato termina el 31 de mayo de 2024.

El artículo 88 de la Constitución habla de la alternabilidad en el ejercicio de la Presidencia. Señala que esto es indispensable para el mantenimiento de la forma de gobierno y el sistema político establecido.

El artículo 152 establece que no podrán ser candidatos a presidente de la República el que haya desempeñado el cargo por más de seis meses, consecutivos o no, durante el periodo inmediato anterior o dentro de los últimos seis meses anteriores al inicio del periodo presidencial; sin embargo, la justificación del Gobierno de Bukele es que el periodo inmediato anterior que menciona la Carta Magna es el del expresidente del FMLN, Salvador Sánchez Cerén, quien gobernó El Salvador entre 2014 y 2019.

Uno de los artículos más contundentes es el 154, el cual señala que el periodo presidencial será de cinco años y comenzará y terminará el día primero de junio, sin que la persona que haya ejercido la presidencia pueda continuar en sus funciones “ni un día más”.

A pesar de la claridad de la Constitución, los magistrados de la Sala de lo Constitucional de la Corte Suprema de Justicia (CSJ) hicieron una relectura e interpretación que contradice el texto constitucional y avala la reelección presidencial consecutiva. Los magistrados que elaboraron esta resolución son abogados afines al Gobierno de Bukele quienes fueron impuestos en el cargo a partir del 1 de mayo de 2021, el mismo día cuando la actual Asamblea Legislativa dominada por el oficialismo asumió el cargo y destituyó sin el debido proceso a los magistrados que estaban en la Sala de lo Constitucional.

Enrique Anaya, abogado constitucionalista, dijo a GatoEncerrado que cualquier cosa que haga el mandatario para buscar la reelección será “inventado” e insistió en que la intención de Bukele de reelegirse es “inconstitucional”.

“La Constitución no prevé nada al respecto, porque lo que está previsto es que no puede haber reelección, cualquier cosa será inventada. Si (Bukele) renuncia o si pide licencia, será todo inventado, no está en ninguna ley. Simple y sencillamente porque el diseño de la Constitución es que no puede presentarse como candidato. Los escenarios pueden ser muchísimos, pero la premisa de la que se debe partir es que la candidatura del presidente Bukele es inconstitucional”, aseveró Anaya.

Además de la imposición de magistrados en la Sala de lo Constitucional, la Asamblea oficialista también hizo una reforma al Código Penal para aumentar de 6 a 20 años de prisión el castigo para quien cometa el delito de “fraude electoral”, en el que se incluye la obstaculización de las candidaturas presidenciales. Esto fue hecho con el fin de que los magistrados del Tribunal no se opongan a la inscripción de Bukele como candidato presidencial.

Peticiones de rechazo a la inscripción

El lunes 23 de octubre, el presidente del partido Nuestro Tiempo, Andy Failer y su candidato presidencial, Luis Parada, interpusieron un escrito ante el TSE para que rechace o declare nula la inscripción de la candidatura presidencial para el periodo 2024-2029 del actual presidente, por “existir incompatibilidad constitucional”.

Además, solicitaron que los magistrados electorales que ya adelantaron criterio sobre la inscripción de Bukele como candidato a la reelección presidencial, consideren que es su obligación “ética y legal recusarse de formar parte de las deliberaciones y de la decisión sobre la solicitud de inscripción inconstitucional de la candidatura presidencial del actual Presidente de la República”.

A la fecha, al menos tres magistrados del TSE: la presidenta, Dora Esmeralda Martínez de Barahona; quien representa al partido Gana; los magistrados Luis Guillermo Wellman Carpio, de Arena, y Noel Orellana, en representación de la Corte Suprema de Justicia, han dicho públicamente que acatarán la resolución de la Sala de lo Constitucional.

Los tres funcionarios justifican su postura en que están obligados a acatar las sentencias judiciales; mientras que el magistrado Rubén Atilio Mélendez García, también de la Corte Suprema de Justicia, ha sido un poco más difuso en sus declaraciones. El único que ha dicho que está en contra bajo el argumento de que “respeta la Constitución” es el magistrado del FMLN, Julio Olivo.

El director ejecutivo de Acción Ciudadana, Eduardo Escobar, explicó a esta revista que si El Salvador se encontrara en una situación regular, los magistrados del Tribunal podrían ser recusados o ellos mismos excusarse de conocer de la petición de Bukele, pero lamenta que eso no pasará, y si fuera el caso que alguien solicitara su recusación, los magistrados no le darán trámite en legal forma.

Francisco Bertrand Galindo explicó a GatoEncerrado que uno de los escenarios posibles es que algunos de los magistrados se excusen. De llegar a pasar, tendrían que asumir los magistrados suplentes, ya que para tramitar la solicitud de inscripción de la candidatura de Bukele se necesitan los votos de la mayoría de los jueces electorales del TSE; sin embargo, al igual que Escobar cree que ese escenario es improbable.

El constitucionalista Anaya fue más tajante sobre la responsabilidad que tienen los magistrados del Tribunal Supremo Electoral en aceptar o rechazar la petición de Bukele. Según dijo, quienes firmen la resolución autorizando su inscripción pierden sus derechos como ciudadanos, tal como lo establece el artículo 75 de la Constitución.

Ese artículo señala que pierden los derechos de ciudadanos quienes “suscriban actas, proclamas o adhesiones para promover o apoyar la reelección o la continuación del Presidente de la República, o empleen medios directos encaminados a ese fin”.

Anaya, junto al dirigente del movimiento Sumar José Marinero, también presentó un escrito ante el TSE, similar al de Nuestro Tiempo, para pedir que no acepten la solicitud de Bukele y que los magistrados tomen la decisión de recusarse de conocer sobre el caso por haber adelantado criterio.

Anaya fue abucheado por los Youtubers y creadores de contenido afines al Gobierno de Bukele que llegaron al TSE. Lo tildaron de “abogado opositor” por pasar de largo con ellos y dar sus declaraciones a los periodistas de medios de comunicación.

En sus declaraciones a la prensa, Anaya aclaró que no era una impugnación, sino una solicitud a los magistrados electorales para que no cometan una inconstitucionalidad.

“La candidatura de Nayib Bukele es claramente inconstitucional, siete artículos de la Constitución ya lo señalan. No estamos impugnando, estamos pidiendo que no se inscriba. ¿Cuál es el truco que está haciendo el régimen? Porque el presidente vendrá a las 11:00 o a las 11:30 de la noche, van  a recibir los papeles. ¿Qué queríamos evitar? Que el día de mañana los magistrados digan que a la una de la mañana decidieron inscribirlo”, manifestó Anaya.

En el escrito, similar al de Nuestro Tiempo, también pidieron que los magistrados propietarios del TSE: Dora Esmeralda Martínez, Guillermo Wellman, Rubén Atilio Meléndez y Noel Orellana, desistan de conocer de la petición de inscripción de la candidatura de Bukele.

En una entrevista de televisión, el magistrado Orellana explicó que los magistrados declararon “improcedente” el escrito del partido Nuestro Tiempo, presentado el 23 de octubre, bajo el argumento de que no podían procesar una petición de ese tipo cuando todavía no habían recibido la petición de Bukele.

Licencia presidencial

Según Anaya, en atención a la resolución emanada de la Sala de lo Constitucional impuesta, Bukele deberá pedir licencia al cargo a partir del 1 de diciembre de 2023, pues la Constitución establece que no puede asumir la Presidencia de la República quien haya ejercido la presidencia seis meses antes del inicio del periodo presidencial. Para Anaya, esto genera otra “distorsión”.

“Tendrá una peculiaridad que solo se da en dictaduras, el mismo candidato a presidente es el presidente. Él continúa siendo presidente y al mismo tiempo candidato, es un absurdo, y hace uso de los recursos del Estado para su imagen. La popularidad no significa legalidad”, cuestionó.

Similar opinión tiene el director ejecutivo de Acción Ciudadana, Eduardo Escobar, de que la “popularidad” de Bukele no le habilita para romper las reglas electorales.

“No porque él sea popular puede postularse a la reelección, porque está prohibida. Si bien el soberano es el pueblo, pero este soberano, aunque quiera que el presidente se postule de nuevo y sea reelecto, tiene que tener claro que el poder del pueblo se circunscribe a la Constitución. Si esto se obvia, entramos a una situación de anarquía, que cualquiera puede cumplir la ley o norma que quiera cumplir, cuando quiera y como le sea conveniente, es un precedente muy peligroso para el país”, explicó Escobar a GatoEncerrado.

Para el abogado constitucionalista, Francisco Bertrand Galindo, el impasse viene en varios niveles, desde su origen, frente a una sentencia de una Sala de lo Constitucional rodeada de un sinfín de problemas legales, pues los magistrados anteriores fueron destituidos y en su lugar la Asamblea colocó a otros abogados sin pasar por el proceso de selección que establece la ley. En otras palabras, el documento que emitió la Sala impuesta además de que contraría la Constitución, carece de validez porque los magistrados están usurpando el cargo y lo ejercen de manera ilegítima. 

El abogado constitucionalista analiza que a pesar de las ilegalidades, la resolución está vigente, pero puede ser desconocida por los magistrados del Tribunal Supremo Electoral mediante un mecanismo que se llama “control difuso de la Constitución”.

“Si un Tribunal Judicial, si un Tribunal Administrativo o Electoral, como es este caso, estima que hay una disposición o una resolución inconstitucional, tiene la facultad de desconocer la resolución y no aplicarla”, manifestó Bertrand Galindo a GatoEncerrado.

Sin embargo, ante la falta de independencia judicial que existe en la Sala de lo Constitucional al haber sido designados de forma directa por la Asamblea oficialista, sin el procedimiento legal, esta acción caería en un vacío legal, ya que si el TSE la aplicara, según Bertrand Galindo, tendría que enviarla a consulta del máximo tribunal constitucional, “y eso nos mete en un círculo vicioso”.

Lo anterior sería la primera parte del “control difuso de la Constitución” del que puede echar mano el TSE; la segunda fase de este mecanismo, según Bertrand Galindo, es que los magistrados electorales revisen si el candidato reúne todos los requisitos de ley para inscribirlo.

Esto involucra todos los atestados que deben presentar los candidatos, entre ellos, la solvencia con el fisco, el finiquito de la Corte de Cuentas de la República, solvencias y otros. Pero en el caso del actual presidente Bukele se añade otro requerimiento: que al mismo tiempo debe pedir licencia, porque así lo estableció la sentencia de la Sala de lo Constitucional que la Asamblea impuso el 1 de mayo de 2021.

“Una manera de interpretar lo que dice la Sala es que al momento de solicitar la candidatura ya se le haya concedido el permiso, si mañana llega a pedir la candidatura tendría que estar pidiendo el permiso hoy”, manifestó.

Este aspecto no está muy claro, pues ni el presidente de la Asamblea, Ernesto Castro, ni el jefe de fracción de Nuevas Ideas, Christian Guevara, dan claridad de quién será el designado o designada a cargo de la presidencia una vez que Bukele pida el permiso, que para ellos deberá ser hasta finales de noviembre para que entre en funciones el 1 de diciembre de este año, según lo que la Sala de lo Constitucional ordenó.

“No podemos dar un designado sin antes que el presidente se inscriba de manera formal, una vez él se inscriba veremos quién lo va a sustituir”, afirmó Castro, hace una semana.

Guevara expresó que será una decisión exclusiva del presidente Bukele escoger a los designados; sin embargo, admite que la Constitución mandata a que sean aprobados por la Asamblea.

“Nosotros vamos a estudiar las propuestas y estoy segurísimo que son en beneficio de los salvadoreños, así como todas las decisiones que ha tomado, que han sido maduras y sensatas, va a traer propuestas que seguirán con la continuidad del trabajo y si los salvadoreños deciden que él vuelva a asumir un nuevo periodo”, afirmó el jefe de fracción de Nuevas Ideas.

De acuerdo con la Constitución, el vicepresidente de la República está llamado a sustituir al presidente, pero en este caso no será así porque Félix Ulloa acompaña a Bukele en la fórmula presidencial.

Siete fórmulas presidenciales

Este 27 de octubre por la mañana, el magistrado Guillermo Wellman confirmó que siete fórmulas presidenciales presentaron solicitudes de inscripción.

“A todos los candidatos se les dio el mismo protocolo, a todos, a todititos, a las siete propuestas que han presentado solicitud de inscripción, no quiere decir que ya están inscritos. Son siete solicitudes de inscripción: los partidos FMLN, Arena, FPS, Nuestro Tiempo, Nuevas Ideas, Fuerza Solidaria y PAÍS”, manifestó tras salir de una entrevista en la televisora TCS.

Agregó que a pesar de que han recibido las solicitudes de inscripción de las siete fórmulas presidenciales, no quiere decir que ya estén en firme, debido a que falta la deliberación de los magistrados para aceptar o rechazar las solicitudes.

“Son siete fórmulas, todavía no se han resuelto, no puedo decirles quienes están inscritos, porque son decisiones colegiadas, porque se están revisando documentos y elaborando resoluciones. Acuérdense que somos jueces, ya ven porque dije que las sentencias son de estricto y obligatorio cumplimiento, ahora dicen abogados que ya adelanté criterio”, añadió.

Añadió que a más tardar la otra semana estarán listas las resoluciones de todas las solicitudes recibidas. En algunos casos ya fueron entregados finiquitos, pero en otros todavía están solicitando solvencias a la Corte de Cuentas y a la Procuraduría.

“La ley dice que son tres días hábiles después de presentadas las solicitudes para resolver, pero también hay cierto margen que tiene el organismo colegiado para resolver. Después se ve si hay que hacer alguna prevención se hace y los partidos tienen otros tres días para responder la prevención”, afirmó Wellman.